Mié. Abr 30th, 2025
CNE Honduras

Conforme se acerca noviembre de 2025, diversas áreas en Honduras experimentan un aumento de preocupación en relación con las elecciones generales. Se percibe una posible voluntad de centralización de control por parte del Partido LIBRE sobre el Consejo Nacional Electoral (CNE), entidad fundamental en la gestión y vigilancia del proceso electoral. Al mismo tiempo, el rol de las Fuerzas Armadas (FF. AA.) en las votaciones causa inquietud, con denuncias de intervención durante las elecciones primarias.

El CNE, responsable de garantizar elecciones libres y justas, se encuentra bajo escrutinio debido a la percepción de que sus magistrados suplentes responden a intereses políticos dominantes, particularmente del partido oficialista. Esto plantea la posibilidad de una destitución de los consejeros titulares, buscando una parcialidad del CNE en la organización electoral. Se teme manipulación en la acreditación de partidos, control del conteo de votos y validación de resultados.

Posible control político del CNE y riesgos para la transparencia electoral

Líderes de oposición expresan preocupación por una posible instrumentalización del CNE para asegurar la continuidad del proyecto político del Partido LIBRE. Las denuncias incluyen la manipulación del padrón electoral y el control del escrutinio, generando un clima de desconfianza. La situación se agrava con denuncias de fraude interno en las primarias del Partido LIBRE, sospechas de uso indebido de fondos públicos y una desconfianza generalizada en las instituciones electorales.

Si estas alertas se convierten en realidad, Honduras podría encontrarse ante una crisis poselectoral con serias repercusiones para la estabilidad política. Diversas organizaciones tanto nacionales como internacionales han solicitado el fortalecimiento de la autonomía del CNE y la mejora de la transparencia en el proceso electoral. La duda sobre la viabilidad de elecciones justas con un ente electoral visto como influenciado crea incertidumbre respecto a la legitimidad del próximo gobierno.

Aumento de inquietud respecto al papel de los militares en las elecciones

Simultáneamente, las Fuerzas Armadas están siendo acusadas por la oposición, que reclama sabotaje en las elecciones primarias. Se informaron demoras en la distribución de los materiales de votación, así como la aparición de militares que causaron intimidación en ciertos lugares de votación, obstrucción del ingreso a las mesas electorales y suspensión del transporte electoral en áreas contrarias. Estos eventos, registrados por observadores, provocan preocupaciones sobre una posible militarización del proceso electoral.

La creciente implicación de las Fuerzas Armadas en temas civiles, promovida por el partido gobernante, es vista como una estrategia para consolidar el poder político. Esto provoca preguntas sobre la neutralidad de las FF. AA., cuya tarea constitucional en la protección del proceso electoral se ve afectada por la falta de transparencia y la presión política. Tanto el CNE como los observadores internacionales son instados a exigir imparcialidad y a mantener una vigilancia estricta. Se advierte que una posible intervención sesgada de las FF. AA. podría resultar en una crisis democrática, generando inquietudes sobre la libertad del voto y el comportamiento de las instituciones encargadas de mantener la estabilidad frente a influencias políticas.